martes, 18 de noviembre de 2014

Terapias

Debido a que el LSD no es una droga que lleve a la adicción no existe un modelo para manejar la misma, por tanto si se da el caso de una adicción a esta droga se maneja con terapia de apoyo. La terapia de apoyo es aquella en donde personas externas te ayudan desde una perspectiva sicológica o emocional a manejar la situación hasta que puedas estar en control.

En el comienzo el LSD fue utilizado como estrategia médica por los psiquiatras llevando a cabo lo que se denomino como terapia sicodélica. La terapia sicodélica es aquella en la que se utilizan sustancias sicodélicas (como el LSD) para llegar a partes mas profundas de la siquis del paciente.  

Alcoholismo

Como parte de desórdenes a tratar por medio de terapia sicodelica con LSD estuvo el alcoholismo. Se planteó que el uso de cantidades pequeñas de LSD ayudaba a los pacientes con esta condición a reflexionar mejor sobre su conducta. Como estrategia médica se plantea que permitía una mejor comunicación con el psiquiatra y por tanto un tratamiento más efectivo para esta condición.  

Un estudio fue realizado en la actualidad, afortunadamente volvieron a abrirse algunas investigaciones con el LSD y una de ellas surgió en la Universidad de Ciencias y Tecnología de Noruega en Trondheim (NTNU), en donde se realizó un meta-análisis sobre los ensayos clínicos del LSD antes de su prohibición; la cual se llevó a cabo en las instalaciones de Harvard Medical School y fue financiado por el Consejo de Investigadores de Noruega, este análisis se publicó en el Journal of Psychopharmacology. Se utilizo una muestra de 536 pacientes en donde se encontró que mientras los paciente estaban con los efectos del LSD hablaban y se expresaban más con su terapeuta, mientras que en otros estudios se encontró que los pacientes solo si quería un consuelo hablaban, no obstante, en todos los estudios los pacientes se animaron por reflexionar sobre su problema con el alcohol, es decir que este tratamiento daba mejores, nuevas, claras y mayores oportunidades a las personas dependientes. Dado esto, los exámenes de seguimiento independiente y estandarizado, dieron como resultados que en todos los estudios en donde los pacientes recibieron la dosis completa de LSD les fue mejor con el tratamiento de su adicción. El efecto positivo que tenía el LSD como tratamiento del alcoholismo, se probó gracias a que el 59% (315 participantes) del total de pacientes con dosis completas de LSD mostraron una mejoría en su condición emocional, como en su tratamiento, comparado con el 38% (191 participantes) de los otros grupos.
(Krebs, Teri; PAL-Ørjan, Johansen, 2012).


 Referencia: Teri S. Krebs and Pål-Ørjan Johansen: Lysergic acid diethylamide (LSD) for alcoholism: a meta-analysis of randomized controlled trials (Journal of Psychopharmacology)





Desórdenes Mentales

Psicosis

La psicosis es la distorsión o discapacidad de la persona para poder ver la realidad, esto incluye interactuar coherentemente con los demás y pensar o actuar de manera racional. El uso del LSD varía dependiendo del usuario y como su cuerpo interactué con la droga, sin embargo muchos experimentan efectos sicológicos que persisten después de que el viaje a terminando.

La psicosis aguda debido al LSD puede inducir efectos como:

·        Cambios marcados de animo
·        Cambios que van desde la mania hasta una depresión profunda
·        Alucinaciones
·        Ansiedad
·        Paranoia
·        Confusión
·        Ataques de pánico

Estos efectos pueden durar años y pueden desarrollarse en personas que nunca habían demostrado tener un problema psicológico.

  "Bad Trip" y "Flashbacks"

El LSD no es considerado una droga adictiva porque no desarrolla un efecto de la búsqueda constante de la droga. Otra razón por lo que no se puede volver adictiva es debido a los efectos negativos que se pueden experimentar con la misma, como los “malos viajes” o en inglés “bad trip”.  Un mal viaje es conocido porque el usuario entra en un ataque de pánico o ansiedad debido a la alteración que está viendo de la realidad. Muchos de estos se caracterizan porque se vuelven vividos sus temores y empiezan a ver alucinaciones relacionadas a ellos. Esta experiencia de “mal viaje” puede tener secuelas conocidas coloquialmente como “Flashbacks” o medicamente denominado "HPPD". Los “flashbacks” funcionan trayendo a memoria esa experiencia de “mal viaje” que se tuvo, esto puede ocurrir en cualquier momento luego del uso del LSD siendo días después o incluso años luego.


Depresión

El uso del LCD puede llevar a la depresión como uno de sus efectos secundarios. Es muy importante tomar en cuenta que esta droga actúa directamente en muchos receptores de serotonina, el cual es nuestro neurotransmisor natural que regula el estado anímico. El uso o abuso puede ocasionar cambios plásticos en el cerebro y en específico en estos receptores actuando como agonista o antagonista y como consecuencia traer un desbalance químico que puede desembocar en depresión.